Iñigo Carrera, Juan
El conocimiento dialéctico. La regulación de la acción en su forma de reproducción de la propia necesidad por el pensamiento CICP, Buenos Aires, 1992. ISBN: 950-798-000-8 |
ÍNDICE
– Presentación
– El desarrollo del capital en acción revolucionaria conciente. Crítica de la teoría científica
– El conocimiento dialéctico; o sea, la regulación de la accón en su forma de reproducción de la propia necesidad por el pensamiento
– Capítulo 1. Qué hacer
– Capítulo 2. El sujeto concreto de la acción; el desarrollo de la necesidad hasta alcanzar su firma concreta de libertad
– Capítulo 3. La forma concreta del proceso dialéctico de conocimiento
- De la determinación de la realidad por el proceso de su reproducción ideal a la manifestación formal de esta reproducción como tal
- El avance de lo singular a lo general: conocimiento y reconocimiento
- El curso general del desarrollo de la capacidad para personificar concientemente la necesidad de las formas reales concretas
- La exposición de la reproducción ideal de la realidad
– Capítulo 4. La reproducción ideal de la realidad vista sucintamente en si unidad concreta
SÍNTESIS DEL CONTENIDO
La formulación de teorías aparece actualmente como la forma natural del conocimiento científico. Pero la propia teoría científica ha llegado ya a la conclusión lógicamente inescapable de que es imposible poner en evidencia la verdad o falsedad de las teorías previamente a la acción. Por lo tanto, las teorías científicas sólo son formas de interpretar al mundo y, como tales, la negación misma de la acción conciente, de la acción que conoce su propia necesidad. El socialismo es el proceso humano de metabolismo social concientemente, luego científicamente, regulado. Tanto como el conocimiento científico esté condenado a la interpretación, el socialismo está condenado a la imposibilidad. La cuestión del desarrollo del conocimiento científico es verdaderamente, hoy día, la cuestión del desarrollo de la necesidad del capitalismo de aniquilarse a sí mismo en una forma social superior. Se trata así, específicamente, del desarrollo del capital en acción revolucionaria conciente. Y, por lo tanto, del desarrollo de la organicidad misma de esta acción, del desarrollo del conocimiento científico como forma concreta necesaria de la acción política radical. No es el conocimiento científico quien se encuentra ante el fin de su historia. Quien lo está, es la teoría científica; forma históricamente específica de ese conocimiento cuando éste es potencia enajenada en el proceso humano de metabolismo social autónomamente regulado mediante la valorización del valor, esto es, en el capitalismo. La crítica de la ciencia hoy, universalmente dominante no toma cuerpo en la construcción de una nueva teoría científica, sino en la superación de la teoría científica misma. No se trata de concebir una nueva representación de la realidad, condenada por su sola condición de tal representación a responder a una necesidad constructiva ajena a la necesidad real, a una lógica. Se trata de apropiar virtualmente a la realidad reproduciendo su necesidad mediante el pensamiento,de la reproducción ideal de la realidad. El desarrollo del conocimiento científico como regulación de la transformación de la sociedad actual en la de los individuos libremente asociados es, pues, la crítica de la teoría científica. En la misma forma de su método, esto es, como conocimiento dialéctico, la reproducción de la propia necesidad real mediante el pensamiento se muestra inmediatamente excluyendo toda apariencia de exterioridad respecto de la acción que sostiene. Se muestra, por lo tanto, como lo que es: la regulación de tal acción; es decir, porción específica de esta acción y, en consecuencia, esta acción misma. La investigación científica supera así toda apariencia de ser el abstracto opuesto de la práctica, para afirmarse como crítica práctica. El despliegue de las formas del conocimiento dialéctico en tanto específica mente tal, sirve ya como punta de lanza para el trabajo necesariamente colectivo en que toma cuerpo la reproducción ideal de nuestra necesidad real; hoy por hoy, la regulación con conocimiento de causa de la transformación radical de la sociedad.